Finalmente no hemos puesto pendientes a nuestra pequeña Laura. Tengo que confesar que hasta el momento, no había dudado de poner pendientes a una hija, si llegaba a tener una. Y de golpe, me ví titubeando y me sorprendí a mí misma. Cuando en la ecografía de los cinco meses nos dijeron que era una niña empecé a pensar en la estética, no os voy a engañar. Nos habían dicho, semanas antes, que parecía un niño y yo estaba convencida de que lo era, así que cuando nos dieron la noticia no pude evitar pensar en vestiditos, diademas y ... pendientes.
Es
verdad que imaginaba unos mini pendientes, unas miniperlitas como si la
niña tuviera que ser a "imagen y semejanza mía" (siempre llevo perlas).
El embarazo avanzaba y yo no dudaba de la decisión. Un día, hablando con
una amiga me comentó casi por casualidad que tenía que volver a
agujerear las orejas a su hija, que ahora tiene 3 años. El motivo era
que el mes de ponerle le habían hecho una reacción muy fuerte que
terminó con infección. Y aquello, me hizo pensar. Y sacó mi vena
enfermera.
Hubiera quedado muy bonito si hubiera alegado motivos sexistas y otros,
pero el motivo por el que decidimos no poner pendientes fue pura
cobardía.
Después de hablar con esta amiga empezamos a pensar:
- Y si le pasa a Laura?
- En serio que por un tema puramente estético (para satisfacer nuestros egos) me arriesgaré a que tenga una infección?
- Aunque sea una probabilidad baja, me la quiero jugar?
- ¿Cómo nos sentiremos si le tenemos que acabar dando antibiótico?
- Y peor aún, como nos sentiremos si ella sufre por ello?
- De verdad te quieres arriesgar a que Laura tenga alguna alergia o queloide?
Y
creo que fue esa misma tarde que se lo comenté a Ferran y decidimos NO
agujerear las orejas a Laura. Este fue el principal motivo. Ahora bien,
a raíz de comentar nuestra decisión con la familia, resulta que
empezaron a salir argumentos que ni siquiera habíamos pensado y que no
hicieron más que ratificar nuestra decisión.
- Es una forma de sexualizar.
-
Por si es niño o niña? - en primer lugar, me importa muy poco lo que
piense la gente. En segundo lugar, con mi hijo me preguntan
continuamente si es una niña. Ya no nos viene de aquí ...
-
Les hace daño- sino no llorarían como lo hacen. Y eso también me
influyó mucho. Si ya lo paso fatal (pero tener diarreas y todo) cuando
la tengo que vacunar y sé que es por su bien, no sé si aguantaría
hacerla sufrir por algo estético.
-
Me terminó de convencer cuando mi tía me dijo que ellos no se los
pusieron a mi prima, pensaron que ya decidiría ella. De esto hace 40
años y mi prima recuerda con mucha ilusión el día que las pidió con 6
años. Le encanta llevar pendientes.
- Pero y si a mi hija, más adelante, resulta que no le gusta llevar pendientes? - habría sufrido para nada.
- Se vería igual si le quisiera agujerear la nariz?
Con
este post no pretendo ni mucho menos juzgar a nadie, de hecho, hasta la
mitad del embarazo no dudaba en ponerle pendientes. Cada madre y cada
padre hacen lo que creen mejor para su hijo y es respetable. Esta solo
es mi opinión, como madre.
- Finalment no hem posat arracades a la nostra petita Laura. He de confessar que fins al moment en que em van dir que era una nena, mai havia dubtat de posar arracades a una filla meva, si mai en tingués alguna. I de cop, em vaig veure titubejant i em vaig sorprendre a mi mateixa. Als cinc mesos ens van dir que era una nena i ja vaig començar a pensar en l'estètica, no us he d'enganyar. Fins al moment ens havien dit que semblava un nen i jo n'estava convençuda així que quan ens van donar la noticia no vaig poder evitar pensar en vestidets, diademes i...arracades.
- És veritat que imaginava unes mini arracadetes, unes miniperletes com si la nena hagués de ser a "imagen y semejanza mía" (sempre porto perles). L'embaràs avançava i jo no dubtava de la decisió. Un dia, parlant amb una amiga em va comentar quasi per casualitat que havia de tornar a foradar les orelles a la seva filla, que ara té 3 anys. El motiu era que al mes de posar-li li havien fet una reacció molt forta que va acabar amb infecció. I allò, em va fer pensar. I va fer sortir la meva vena infermera.
- Hagués quedat molt bonic si hagués alegat motius sexistes i altres, però el motiu pel qual vam decidir no posar arracades va ser pura covardia.
- Després de parlar amb aquesta amiga vam començar a pensar:
- - I si li passa a la Laura?
- - En serio que per un tema purament estètic (per satisfer els nostres egos) m'arriscaré a que tingui una infecció?
- - Encara que sigui una probabilitat baixa, me la vull jugar?
- - Com ens sentirem si li hem d'acabar donant antibiòtic?
- - I pitjor encara, com ens sentirem si ella pateix per això?
- - De veritat et vols arriscar a que la Laura tingui alguna al•lèrgia o queloide? I crec que va ser aquella mateixa tarda que li vaig comentar a Ferran i vam decidir NO foradar les orelles a la Laura. Aquest va ser el principal motiu.
- Ara bé, arrel de comentar la nostra decisió amb la família, resulta que van començar a sortir arguments que ni tan sols havíem pensat i que no van fer més que ratificar-nos en la nostra decisió.
- - És una forma de sexualitzar.
- - Per si és nen o nena?- en primer lloc, m'importa molt poquet el que pensi la gent. En segon lloc, amb el meu fill em pregunten contínuament si és una nena. Ja no ens ve d'aqui...
- - Els hi fa mal- sinó no plorarien com ho fan. I això també em va influir molt. Si ja ho passo fatal (però de tenir cagarrines i tot) quan l'he de vacunar i sé que és pel seu bé, no sé si aguantaria fer-la patir per una cosa estètica.
- - Em va acabar de convèncer quan la meva tieta em va dir que ells no els hi van posar a la meva cosina, van pensar que ja decidiria ella. D'això en fa 40 anys i la meva cosina recorda amb molta il•lusió el dia que les va demanar amb 6 anys. Li encanta portar arracades.
- - Però i si a la meva filla, més endavant, resulta que no li agrada portar arracades?- hauria patit per res.
- - Es veuria igual si li volgués foradar el nas?
- Amb aquest post no pretenc ni molt menys jutjar a ningú, de fet, fins a la meitat de l'embaràs no dubtava en posar-li arracades. Cada mare i cada pare fan el que creuen millor pel seu fill i és respectable. Aquesta és només la meva opinió, la de mare.
Mi experiencia como madre es la siguiente : a mi hija le puse pendientes al nacer.... Pensé mira que mona está ... Ahora bien.... El tiempo pasa... Y ahora con 3 años un buen día sale del cole con un pendiente menos ... Horror !! Le intento poner otro, por el tema que dicen "sino, el agujero se cerrará " ella me dice que ni hablar, que no quiere otro... Que quiere el que tenía. Evidentemente eso es imposible y la intento convencer de que iremos a comprar unos nuevos, iguales o lo más parecido posible. Su respuesta sigue siendo la misma.... NO. Le explico que se me cerrará y que no podrá ponerse más pendientes a no ser que Le volvamos a hacer un agujero.... El resumen? Vamos con un pendiente si y otro no.... De momento indefinidamente. Así que... Bien Neus, si ella lo decide tiene toooda la vida para ponerse y quitarse pendientes. Un beso
ResponderEliminarJajajaj! Pues oye, no había pensado yo en tu situación. La verdad es que en esta edad se vuelven tan tozudos...que no imagino pelearme encima por un pendiente!
Eliminarjejeje
Muchísimas gracias por pasarte por aquí.
Yo estoy de acuerdo, si tuviese una niña tampoco se los pondría por lo mismo miedo a infecciones y a que le hagan daño. Yo no voy a hacer sufrir a un bebé por gusto! Ya me costó bastante que le cortarán el frenillo al mayor y era cuestión médica! Mi sobrina tampoco lleva pendientes y nadie se los echa en falta.
ResponderEliminarA mi también me pasa. Sufro mucho con cosas que son necesarias, así que no me imagino con algo estético! Me alegro no ser la única!
EliminarBesos